Sorloth despide la temporada con otro hat-trick

El primer objetivo del Atlético en el último partido del curso era asegurar el sexto trofeo Zamora de Jan Oblak y, para no correr riesgos, Simeone alineó a Musso desde el comienzo en la portería. Nadie ha conseguido tantos como el esloveno, arropado siempre por la estructura defensiva diseñada por Simeone a lo largo de los años.

El segundo objetivo del día era ganar el partido y despedir el curso con buenas sensaciones para afrontar el Mundial de clubes, a medias entre esta temporada y la que viene. Y de eso se encargó Alexander Sortloth. El noruego volvió a exhibir su habilidad para decidir partidos entrando desde el banquillo y a demostrar su puntería en cortos periodos de tiempo. Apenas estuvo media hora sobre el césped, suficiente para marcar tres goles, que podían haber sido uno más si no hubiera tirado a dar en un mano a mano con Krapyvtsov, el portero ucraniano del Girona.

Sorloth marcó el primero, en el que sólo tuvo que empujar la pelota a la red y parecía que ya había hecho todo lo que necesitaba su equipo para ganar ese partido. Y en realidad no le hizo falta más, aunque el delantero rojiblanco siempre tiene hambre, además de una cuenta pendiente con el Girona, que se esforzó en el último partido de la temporada pasada para que Dovbyk le quitara el trofeo de máximo goleador del campeonato en el último partido del curso.

Se desató el Atlético en los últimos minutos del partido. Ahí llegó el gol de Lenglet, que sólo tuvo que empujar, sin dejarla caer, la pelota que se le había escapado al guardameta del Girona. Y llegaron dos más de Sorloth, uno de ellos en un regalo de Julián Álvarez, que volvió a ser uno de los más visibles de su equipo.

Los minutos finales del partido sirvieron, además, para ver los que, según él, son los últimos minutos de Correa en la Liga como rojiblanco, aunque el club piense de manera diferente al menos en público. Y lo hizo Correa con el brazalete de capitán. Sólo le faltó el gol para que la despedida fuera completamente feliz.

En el Girona también era momento de despedidas como la de Juanpe, el último superviviente del primer ascenso del Girona a Primera División. Un futbolista que se marcha después de haber participado, y marcado, en el estreno del Girona en la Liga de Campeones.